Cada vez más voces se alzan avisando de que los combustibles fósiles están acabándose y que, con el ritmo actual de consumo, no quedan suficientes para durar más allá de 50 años. Por eso las grandes empresas están apostando por energías renovables como la biomasa, la energía eólica o la energía hidráulica aprovechando la fuerza de las aguas del mar o los ríos.
El sector que rodea la sostenibilidad energética está en crecimiento y cada día se conocen nuevas propuestas para producir electricidad y carburantes más que interesantes.
– Electricidad desde pasos. Este es un proyecto que se está desarrollando en las canchas de fútbol de Río de Janeiro: los pasos de los jugadores se convierten en electricidad a través de 300 azulejos que capturan la energía cinética.
– Olas. La fuerza del mar es incontestable, tanto, que se ha estudiado que su aprovechamiento lograría producir el doble de la energía que se produce hoy en día en el mundo. En Escocia, Sam Etherington está probando un dispositivo que captura el poder de las olas desde la superficie del agua, trabajando sobre una base de múltiples ejes (pudiendo generar energía sin depender de la dirección de las olas).
– Energía desde las estrellas. Aunque pueda sonar a ciencia ficción, Richard Dinan quiere obtener energía desde el espacio para utilizarla en la Tierra. La empresa Applied Fusion Systems está desarrollando un reactor tokamak, que atrapa plasma de un campo magnético para generar energía nuclear.
– Estufas de leña y pellets, cocinas de leña que también alimentan los radiadores, edificios autosuficientes que crean y recuperan la energía que se utiliza o nuevas aplicaciones de la biomasa son algunos de los trabajos que se están desarrollando en la actualidad. Su instalación permite un ahorro considerable a medio – largo plazo para las familias y empresas, además de una mejora para la conservación del medio ambiente.
Fotografía: ©PEDRO TERRADES